¿Qué es un primer de maquillaje o prebase y cómo se aplica?

El mundo del maquillaje está lleno de secretos y pequeños gestos que marcan la diferencia. Uno de los más interesantes -y fáciles de incluir en nuestro día a día- es aplicar una prebase de maquillaje. Porque cuántas veces sucede que nos maquillamos a conciencia, pero notamos que la piel no queda realmente uniforme. O que se marcan las arruguitas o van apareciendo los poros como por arte de magia con el paso de las horas… Pues bien, el ‘primer’ tiene la respuesta a todos esos problemas. 

Pero, por mucho que sea un clásico en el maletín de los maquilladores profesionales y que no paremos de escuchar sus bondades en las redes sociales, mucha gente se sigue preguntando qué es una prebase de maquillaje. Este tipo de productos, que combinan las propiedades de un tratamiento con un efecto lifting o flash, y se aplican antes de la base, dejan la tez como un lienzo, preparada para seguir maquillándola con el mejor resultado posible. 

¿Cómo funciona el primer?

En realidad, estas fórmulas se encuentran a medio camino entre el skincare y el maquillaje. Aunque existen opciones para diferentes necesidades (prebases iluminadoras, antimanchas, matificante, antirrojeces o con protección solar…), la mayoría aportan a la piel unos beneficios comunes:

  • unifican el tono
  • suavizan e igualan la textura disimulando la apariencia de los poros
  • ofrecen al cutis una hidratación prolongada
  • perfeccionan el acabado del maquillaje que se aplique a continuación

Además, otro aspecto muy valorado por las usuarias de los primers es que ayudan a fijar el resultado del maquillaje durante mucho más tiempo. Al dejar la piel matificada y más lisa, la aplicación de la base o el fondo resulta más cómoda y evita la aparición de brillos o, por el contrario, del indeseado efecto cuarteado que se marca en las arrugas. 

prebases de maquillaje

La respuesta perfecta para las pieles estresadas

Como decíamos, uno punto importante es que existen prebases de maquillaje adaptadas a las diferentes necesidades de la piel. En Atashi encontramos K-Bioferment Therapy Cream, un pretratamiento de día revitalizante y multicorrector, perfecto para las pieles sin descanso y sometidas a estilos de vida agotadores. Su fórmula, basada en la cosmética coreana, que incluye biofermentos (de efecto postbiótico) y el hongo Ganoderma, capaz de activar la regeneración celular, fortalece día tras día la piel y su microbioma, protegiendo, además, la epidermis del estrés epigenético.

Por tanto, por un lado, actúa como un completo tratamiento de cuidado de la piel. Por ejemplo, el hecho de que contenga fermentados -como el mijo dorado orgánico o el ácido hialurónico derivado de la fermentación- permite obtener activos con una mayor eficacia, traduciéndose en una acción antiedad realmente potente y rápida. Por otro lado, aporta beneficios inmediatos como el efecto flash calmante, un lifting inmediato o la capacidad de minimizar la apariencia de los poros. Propiedades que consiguen que el maquillaje aplicado a posteriori quede impecable y dure mucho más tiempo intacto. 

Así tienes que aplicar la prebase de maquillaje

Es fácil deducir que la prebase se aplica como punto de partida del maquillaje. Es decir, se trata del primer producto de tu rutina de color: empieza con ella y después se puede dar rienda suelta a la creatividad y la maña con polvos iluminadores, bronceadores, sombras o coloretes. 

Pero eso no significa que haya que saltarse la parte de tratamiento. Lo ideal sería cada mañana limpiar el rostro, tonificarlo y aplicar el sérum correspondiente. Al llegar a este punto, depende mucho de la fórmula que tengamos entre manos. Algunas, como K-Bioferment Therapy Cream, de Atashi, son tan completas que sustituirían a la crema de día, mientras que otras se usarían justo después de todo el ritual de skincare.

En cualquier caso, siempre se extienden con suaves masajes sobre la piel totalmente seca, hasta que se funda con ella, y unos segundos antes de la base de maquillaje para que los ingredientes puedan actuar. Es importante insistir en zonas tradicionalmente problemáticas como las mejillas, la barbilla o las aletas de la nariz. Con respecto a la zona del contorno de ojos puedes optar por escoger una prebase de ojos, específica para piel madura, o aplicar la del rostro en la ojera, patas de gallo y párpados para perfeccionar la mirada y darle un toque más fresco.

Los errores más comunes al aplicar el primer

Por muy sencillo que sea su uso, nadie se libra de cometer algún fallo a la hora de aplicar una prebase. Lo más habitual es no dejar actuar la fórmula y extender la base de forma inmediata. Como sucede con cualquier otra rutina compuesta por varios pasos, ya sea de maquillaje o de skincare, es importante esperar a que cada producto se asiente para que sus ingredientes puedan actuar. Para ello, basta con dejar unos segundos y notar que el rostro está totalmente seco antes de ponerse con la base. 

Otro error frecuente es extender demasiada cantidad. Es preferible quedarse un poquito corta, pero extenderla bien por todo el rostro, con suaves movimientos circulares ascendentes. Y también es importante realizar este gestual sobre la piel limpia, tonificada y con el sérum ya aplicado. Aunque las fórmulas de los primers sean cada vez más sofisticadas es importante mantener un correcto cuidado de la piel. Por último, no debemos olvidarnos de extender el producto también por el cuello, un clásico gran olvidado cuando hablamos de cualquier rutina. 

¿Puedo usar sola la prebase de maquillaje?

Dado que sus beneficios son tantos, es bastante frecuente plantearse si podemos usar el primer sin aplicar después el fondo de maquillaje. Lo cierto es que no es absolutamente necesario que ambos productos vayan de la mano y, de hecho, el resultado sorprende bastante. 

Al dejar la piel iluminada, lisa y con un aspecto fresco y jugoso, la prebase se convierte en una opción perfecta para conseguir por sí sola un look de aspecto natural. Muy en línea con los efectos ‘no make-up’, ‘clean girl’ o la estética ‘vanilla girl’. Tendencias todas ellas que arrasan en redes (especialmente en TikTok) y abogan por un acabado de la piel minimalista, confortable y discreto, pero que no deja lugar a imperfecciones. 

como aplicar una prebase

Farmacéutica Licenciada por la Universidad de Alcalá de Henares, con más de 25 años de trayectoria profesional y de gran autoridad en el sector de la belleza saludable. Especialista en la conceptualización, investigación y desarrollo de productos en la industria dermofarmacéutica y nutricosmética para el cuidado y salud de la piel. Apasionada de la industria dermofarmacéutica, es miembro del Claustro de Profesores del Centro de Estudios Superiores de la Industria Farmacéutica (CESIF).