¿Crema de día o de noche? Conoce sus diferencias y usos

La primera diferencia entre una crema de día y una de noche es su objetivo: la primera busca hidratar y proteger, la segunda se enfoca en reparar y regenerar. 

Esto es comprensible, puesto que durante el día la piel necesita protegerse de la acción del estrés medioambiental, de la contaminación y de la radiación ultravioleta (UV). 

Mientras que por la noche requiere una nutrición intensa y una composición que potencie los efectos de la reparación que se produce durante el sueño.

Para ponértelo fácil, hemos recopilado para ti en este artículo, una recopilación de las características que diferencian una crema de día de una de noche.

¿Qué es una crema de día y una de noche?

Una de las mejores maneras de abordar sus diferencias es comenzar por definir qué es una crema de día y una de noche. 

Por un lado, la crema de día es una formulación cosmética diseñada especialmente para hidratar y proteger la piel a lo largo del día. 

Por este motivo, suelen contar con ingredientes que ayudan a bloquear o limitar los efectos de la radiación UV, la contaminación, el clima u otros agentes externos. 

Dado que tienen una textura más ligera, tu piel la va a absorber rápidamente y vas a poder aplicar maquillaje poco tiempo después. 

En lo que respecta a la crema de noche, el enfoque es diferente. Se trata de preparaciones faciales orientadas a nutrir y reparar, aprovechando que es por la noche cuando la piel se regenera. 

Por esta razón, se trata de composiciones de texturas más densas, la mayoría de las veces con base oleosa. 

Si te preguntas si es necesario usar crema de día y de noche, digamos que es recomendable integrar estos dos cuidados en tu rutina facial. Lo vas a entender a través de las diferencias que, en definitiva, profundizan en su definición.

Principales diferencias entre una crema de día y de noche

Te proponemos seguir con la exposición de las diferencias entre una crema de día y de noche a través de 2 elementos distintivos: su función y su composición. 

1. Función

Una crema de día se va a centrar más en conseguir una hidratación prolongada, así como una protección frente a los radicales libres gracias al efecto sellado que proporciona. 

En el caso de una crema de noche está diseñada para favorecer la nutrición y combatir los signos del envejecimiento potenciando la renovación celular.

Esto es así porque mientras duermes la piel inicia un proceso de reparación, regeneración y renovación celular. Así, utilizar una crema específicamente diseñada para potenciarlo mejora su aspecto notablemente al levantarte. 

Piel hidratada con brillo

2. Composición

En lo que respecta a la composición, cada tipo de crema facial, dado que se focalizan en objetivos diferentes, cuenta con ingredientes específicos que se retroalimentan para lograr sus objetivos. 

Por ejemplo, en una crema de día es habitual encontrar ingredientes antioxidantes como la vitamina C y E, humectantes como el ácido hialurónico, y componentes ricos en ácidos grasos que ayudan a prevenir el envejecimiento prematuro de la piel como la manteca de karité. 

Asimismo, suelen incluir ingredientes calmantes para evitar posibles irritaciones causadas por el estrés ambiental, entre otros factores, como pueden ser la caléndula o la centella asiática.

Por otro lado, para reforzar la protección, es habitual que estas cremas incorporen un factor de protección solar. 

Por su parte, una crema de noche, al priorizar el efecto reparador y regenerante, suele contar con ingredientes como el retinol que estimula la producción de colágeno, o la melatonina que repara el estrés oxidativo.

Comparación de una crema de día y una de noche: ejemplo práctico

Como recapitulativo de todo lo que acabamos de comentar, te proponemos hacer una comparativa entre una crema de día y una de noche Atashi.  

De esta manera vas a poder darte cuenta de la importancia de la función y composición en cada una de ellas: 

Crema hidratante Redensificante Atashi

Crema hidratante redensificante SPF 15. Una crema de día con efecto antiestrés y calmante que protege del daño solar por su factor de protección. Además, hidrata en profundidad por los extractos de mimosa, jojoba y girasol que contiene. Las células nativas de Gardenia Jasminoides estimulan la producción de colágeno y ayudan a reducir las líneas de expresión. 

Supernight Dermo Filler Mask Atashi

SuperNight Dermo Filler Mask. Una mascarilla regeneradora de noche que no necesita aclarado, de textura rica y fundente, que estimula la producción de ácido hialurónico natural. Su acción reparadora se debe a su contenido en liposomas A, C y E, melatonina, niacinamida y Blue Oléoactif. El ácido hialurónico acetilado actúa mientras duermes y ofrece resultados visibles en 6 horas. 

¿Se puede usar una crema de día por la noche o una de noche por el día?

En principio, no vas a estropear tu piel si utilizas una crema de día por la noche o una de noche durante el día. 

Sin embargo, probablemente te sientas más cómoda durante el día y sobre todo cuando hace calor, con una textura ligera en vez de más densa.

Luego, otro factor que debes considerar son los ingredientes. Te lo comentamos porque, dependiendo de la concentración de algunos, pueden causar fotosensibilidad y propiciar la aparición de manchas de sol u otro tipo de reacciones. 

Entre ellos se encuentran el ácido glicólico y salicílico, o ciertos perfumes y fragancias que puedan incluirse en el producto.

En el mismo orden de cosas, la crema de noche aplicada durante el día no va a poder cumplir con su función regenerante con la misma eficacia que por la noche.

Crema de día y de noche: cómo elegir la que necesita tu piel

Presta atención a 3 criterios de compra básicos a la hora de seleccionar tus tratamientos: 

1. Tu tipo de piel. 

Cada piel tiene unas necesidades especiales. Por ejemplo, las pieles secas van a requerir ingredientes hidratantes y emolientes, las grasas necesitan componentes reguladores y no comedogénicos, es decir que no obstruyan los poros. 

En cuanto a las pieles mixtas, debes buscar soluciones equilibrantes, y las pieles sensibles necesitan cremas suaves, hipoalergénicas y calmantes.

2. Los ingredientes. 

Ten claro lo que buscas en una crema y elige formulaciones multiactivas que creen sinergias entre sus ingredientes. 

Por ejemplo, si quieres combatir una piel seca y pigmentada, y mejorar su textura, busca tratamientos con ingredientes humectantes, antiinflamatorios y antimanchas. 

3. La textura. 

Influye en la sensación de confort, pero también en propiciar la absorción de los principios activos. 

Según el tipo de piel, es recomendable una textura u otra. En el caso de las pieles grasas, evita las cremas demasiado densas porque no las va a poder absorber. 

Farmacéutica Licenciada por la Universidad de Alcalá de Henares, con más de 25 años de trayectoria profesional y de gran autoridad en el sector de la belleza saludable. Especialista en la conceptualización, investigación y desarrollo de productos en la industria dermofarmacéutica y nutricosmética para el cuidado y salud de la piel. Apasionada de la industria dermofarmacéutica, es miembro del Claustro de Profesores del Centro de Estudios Superiores de la Industria Farmacéutica (CESIF).